Salimos de Huélago a las 9’30 horas de la mañana, Desiderio Samaniego, Mercedes Pérez, Jaime Vílchez, Trinidad Aguilera, Fernando Vílchez, Ana Ortega, Amelia Cobo, María García, Trinidad García y María Pérez.
Llegamos a Almuñecar a las 11 horas, el hotel se llama (Apartamentos Turismo Tropical). Nos asignaron los apartamentos, a nosotras las cuatro viudas en el número 103, los tres matrimonios en apartamentos continuos, todos son adosados y dan a un gran patio con una piscina y muchas flores.
Los apartamentos tienen dos dormitorios con dos camas, cocina amueblada, frigorífico, microondas, todo lo principal de una cocina; un cuarto de aseo, un comedor pequeño con su mesa, sillas y una televisión.
Los apartamentos tienen dos dormitorios con dos camas, cocina amueblada, frigorífico, microondas, todo lo principal de una cocina; un cuarto de aseo, un comedor pequeño con su mesa, sillas y una televisión.
A las 12’30 horas una Señorita de la Diputación llamada Eloisa, que fue candidata en unas elecciones municipales al Ayuntamiento de Huélago, nos dio una charla. Entre otras cosas nos dijo, que la administración y los funcionarios están para atender al publico, que aprovecháramos el tiempo libre que ahora tenemos en aprender cosas, en divertirnos, pasarlo bien, juntarnos los mayores, contarnos nuestras cosas, que la Diputación está al servicio de los pueblos menores de (20000) habitantes y muchas más cosas.
Nos informo de lo que tenían que hacer los Ayuntamientos y el alcalde como presidente es, decirle a la diputada que corresponda, que los mayores del pueblo quieren ir de viaje y en la Diputación va poniendo en lista por riguroso turno los pueblos que lo soliciten.
Habíamos gente de cuatro pueblos, todos mayores, de Cacín, Dólar, la Fuente, y Huélago. A la 1’30 comida, de primero habichuelas con carne, de segundo lenguado frito con ensalada, vino, casera, y postre. Después nos dimos una vuelta por la orilla de la playa, estaba un poco alborotada, hacía viento y lloviznaba.
La calle que da a la playa es todo hoteles, restaurantes, cafeterías y algunas tiendas de subvenir, no se de donde habrán sacado esta palabra, tan bonito como es nuestro idioma, tienda de regalos o recuerdos. A las 8’30 de la tarde noche, la cena, después de la cena un rato de fiesta en un salón del hotel, una monitora la dirige para que todos se diviertan.
Día 27 viernes por la mañana y después del desayuno un rato de gimnasia de mantenimiento, luego fuimos al mercadillo, donde, había de todo, como en todos los mercados, después nos fuimos a comer y a las cuatro de la tarde fuimos a la Herradura en un autobús.
Subimos a Cerro Gordo, andando por una vereda muy estrecha, el cerro es muy grande con mucha vegetación, pinos y muchas plantas, en lo alto hay una torre árabe, muy bien conservada a 1.800 metros del nivel del mar. Nos dijo la guía, llamada Belén, que es zona protegida, hace poco han echado cabras montesas y otros animales. Desde el cerro el paisaje es precioso, se ve el mar que hace un golfo con la forma completamente de una herradura, de ahí el nombre del pueblo que está construido alrededor del golfo; está situado entre dos cerros por lo que el aire quiebra y cuando hace mucho viento todos los barcos van a ampararse al puerto, que es deportivo. Lo estuvimos visitando, hay muchos barcos de recreo todos muy bonitos, después fuimos a visitar un invernadero donde había plantas y macetas de todas clases, compramos algunas macetas.
A la vuelta ya en Almuñecar nos invitaron en un bar a chocolate y buñuelos lo pasamos muy bien. Volvimos al hotel, después como el día anterior a la sala de fiestas, bailaron, contaron chistes, hicieron juegos y pasamos el rato.
Día 28 por la mañana fuimos al centro del pueblo paseando, subimos al monte Santo en donde hay una Cruz y hay un mirador desde donde se ve todo el pueblo de Almuñecar. Este cerro es pequeño pero muy pronunciado, el camino es muy pendiente con una rampa con muchas curvas, hace un cabo con una punta de tierra o piedras que entra mucho en el mar, es dificilillo de subir, pero merece la pena por las vistas que tiene desde el mirador.
Por la tarde estuvimos dando cuatro vueltas por ver algo del pueblo, después como todas las noches la fiesta, nos dieron una copa de champán y brindamos todos juntos.
Día 29 después de desayunar recogimos el equipajes, los llevamos a recepción y entregamos las llaves del apartamento, luego fuimos a ver la factoría de salazón de pescado llamado, según la placa que allí hay, EL MAJUELO del siglo –IV antes de Cristo, al siglo IV después de Cristo. Púnico Romano, para quien le gusta la historia como a mi, son cosas de mucho merito pues aquellas gentes, creo que fueron los primeros inventores aprovechando los medios de la naturaleza, que es lo que tenían, a continuación hay un parque con unos árboles que deben de tener siglos según los troncos que tienen, son unas especies muy raras, recuerdo el nombre de algunos, Palmera de Helechos, parecían sus ramas helechos grandísimos, otro, Palmera de Botella, por la forma del tronco como una botella. Desde allí nos fuimos a Misa, a la iglesia de la Encarnación, está a media hora del hotel.
La iglesia es preciosa, tiene en el altar mayor un cuadro en relieve con la Anunciación, el Ángel y la Virgen María, un Señor en la Borriquilla y muchas más imágenes, una vez terminada la Misa, nos fuimos al hotel a comer, después vino el autobús a recogernos, salimos para Huélago y llegamos a las 5 de la tarde, lo hemos pasado muy bien. Se me olvidaba, el Mediterráneo es precioso solo nos mojamos los pies pero causa mucho respeto.
María Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario